Hace unos días hablaba sobre la manera que tengo de entender la fotografía, dónde el proceso final acaba en el procesado de lo capturado por la cámara y comentaba que pondría un ejemplo. Pues bien, aquí está una foto que creo se ajusta perfectamente a lo que comentaba.
Se trata de un retrato que le hice a Gonzo el año pasado, cuando nos juntamos unos cuantos amigos para preparar una sesión a lo "Hellboy", la cual dio para más de una anécdota que no viene al caso ahora... :-D
Original
Se colocaron las luces de tal forma que se marcasen bien los perfiles del modelo, así como un relleno para evitar diferencias demasiado fuertes de luces y sombras. Esto nos permite después en el procesado obtener mucha información que con otra iluminación sería imposible.
Primer ajuste de luces y sombras
Pero esta toma estaba destinada a terminarse en el ordenador, y no hablo solo de modificar colores y disimular los materiales utilizados. Si os parais a mirar la foto original, la notareis blanda y con "las zonas oscuras demasiado claras". En fotografía de película se exponía para las sombras, en el mundo digital es todo lo contrario, lo hacemos para las luces altas (cuestiones de bits, simplemente).
Añadida textura al fondo
En una fotografía donde podamos oscurecer las zonas iluminadas, tenemos más probabilidades de obtener un buen resultado que si ocurre lo contrario, en este último caso de una foto subexpuesta, aparecería ruido y el detalle de la foto se vería resentido.
Foto final
Después ya vino el entretenimiento con la foto, tengo que reconocer que tardé un montón en terminar esta que veis, no tengo mucha experiencia en este tipo de montajes, pero me lo estaba pasando bien y la fui procesando en varios días, guardando el fichero por capas (son unas cuantas...).
Espero que os sirva a alguno lo que he contado, no soy yo la persona más técnica precisamente para contar este tipo de cosas, pero creo que las imágenes ayudan un poco a comprender el texto, espero... ;-)
2 comentarios:
...y al final te quedó de la virgen. Muy buen trabajo.
Yo añadiría a lo que nos comentas que el verdadero final del proceso fotográfico termina con la foto impresa, aunque la realiadad sea, al menos en mi caso, que esto sólo sucede en el 5% -o menos- de las fotos que hago.
Saludos_
Gracias tío!
Tienes razón con lo de la foto impresa, yo de vez en cuando envío alguna al laboratorio, pero es cierto que son pocas, es lo que tiene el mundo digital...
Un abrazo!
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